En Costa Rica la agroindustria cañero-azucarera es un motor de la economía importante, ya que por cada 1.000 millones de colones de demanda de azúcar se producen 2,401 millones de colones adicionales en la economía. Precisamente, dada su importancia, se ha convertido en una prioridad para la preservación del medio ambiente.
En esta línea, las Acciones de Mitigación Nacionalmente Apropiadas (NAMA, por sus siglas en inglés) de Caña de Azúcar en Costa Rica corresponde a la primera de este sector desarrollada a nivel mundial y está alineada a varios Objetivos de Desarrollo Sostenible como: ODS 9 Industria, Innovación e Infraestructura, ODS 12 Producción y Consumo Responsable, ODS 13 Acción por el Clima y ODS 17 Alianza para lograr los Objetivos.
La iniciativa es promovida a nivel sectorial por la Liga Agrícola Industrial de la Caña de Azúcar (LAICA) en conjunto con los ingenios y los productores independientes y tiene como objetivo transformar los métodos de cultivo de la caña de azúcar para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y aportar a las acciones para prevenir el cambio climático, así como incrementar los niveles de productividad agrícola actuales mediante reducción de costos, optimización del uso de recursos entre otros.
A través de este proyecto, se tiene como meta lograr establecer a partir del año 2025 una fase inicial de un Plan Piloto al instalar al menos 70 parcelas comparativas, en las cuales se desarrollarán durante 5 años una serie de acciones con el fin de validar las estrategias, tecnologías y mecanismos propuestos para mitigar los GEI y los Gg de CO2 eq por medio de tres escenarios propuestos para la producción de caña de azúcar hasta lograr en el año 2035 cubrir el 75% del área nacional sembrada en el país, espacio que actualmente ocupa 60.668 ha.
Sin duda, los esfuerzos que se realizan en este campo son de vital importancia para la preservación del medio ambiente y el bienestar social, así como para elevar el grado de eco-competitividad nacional e internacional del sector. Estas iniciativas son un paso más hacia la revolución del sector en miras a lograr un equilibrio sostenible en la producción de alimentos y que se han ido logrando con un gran esfuerzo de concientización y alineamiento de todos los eslabones de la cadena productiva que comprenden la importancia de las implementaciones escalonadas para alcanzar los objetivos de todo un sector.